Antes de que hagamos cualquier reparación, tendremos que asegurarnos de que no hay ramas cerca que pudieran estar ensuciando y taponando el canalón con hojas.
Después de eso, nuestros operarios limpian con un cepillo de raíz y agua a presión, el polvo que se hubiera depositado tanto en el canalón así como los posibles atascos en las bajantes.
Cuando hemos realizado la limpieza, podemos observar las posibles fugas o agujeros, problemas de pendientes y que los soportes pudieran estar sueltos.
El problema de la pendiente suele darse cuando nos encontramos instalaciones antiguas en las que los soportes se han colocado a más de 60 cm entre sí o bien en el momento de la instalación no se dio la inclinación adecuada.
Otra de las reparaciones habituales es la referente a fugas en los empalmes, los nacimientos y los fondos.
Nuestro personal está capacitado para dar todo tipo de soluciones a los problemas de nuestros clientes.
En este caso, limpiamos los empalmes y damos una capa de tapagoteras.
Sellamos con bandas de aluminio los agujeros y fijamos con tornillos, según el caso.